Hilos de colores unen destinos. 

Agujas filosas marcan los puntos que unen las hebras que llevan a las coloridas capitales. 

Bordo flores como bordo lugares que tienen cielos, árboles, calles, edificios. 

Bordo sus texturas: calles grises de asfalto áspero en puntos voluminosos, e hilos que van uniendo esos caminos con casas y jardines de sedosos hilados y agujas más amables que bordan con delicadeza apastelados rosas, verdes y celestes y los abigarrados amarillos, rojos y azules de las flores que adornan los alfeizares de las ventanas. 

Los hilos y las agujas del destino, de los miles de destinos viajeros que surgen de este punto en el que estoy, aquí y ahora. 

¿Muevo la aguja hacia la izquierda o hacia la derecha? ¿Uno con el hilo azul el destino final del viaje que partió hace apenas un momento? ¿Con qué hilo y con qué color bordaré el nuevo destino del nuevo viaje? 

¿Bordaré un río verde azulado o será un mar ancho de turquesa profundo y áspero? ¿O mi nueva y poderosa aguja bordará un cielo azul cerúleo con estrellas blancas y brillantes que representan la Cruz del Sur? 

Bordo viajes. 

Bordo destinos.